2020: Nuevo Comienzo, Nueva Normalidad, Actualización Divina
En septiembre del 2019, Dios nos dio tres palabras para el 2020: nuevo comienzo, nueva normalidad, actualización divina.
Nuevo comienzo
El Señor estaba “pasando la página” de la historia humana y moviendo al mundo hacia un nuevo capítulo de su historia. Si bien su historia no ha cambiado, Él está haciendo algo nuevo, algo sin precedentes en nuestro tiempo, en esta década y más allá.
Esta década es una nueva etapa de preparación más intensa que requiere perseverancia en medio de las intensas turbulencias. Es el comienzo de un nuevo movimiento en su Espíritu que resultará en el despertar del ejército de Gedeón, el ejército de Dios del final de los tiempos, dónde la generación joven se levantará con poder.
Debido a que entramos en este nuevo capítulo, debemos dejar atrás nuestros éxitos y fracasos pasados, debemos olvidarnos de las viejas formas de ver y hacer las cosas (Isaías 43:18). Necesitamos deshacernos de todo peso que nos asedia (Hebreos 12:1) para poder entrar al Nuevo Comienzo con Él.
Nueva normalidad
A través del Covid-19, Dios llevó al mundo a una Nueva Normalidad, esto puede ser tanto en lo positivo como negativo. (Incluso el mundo secular y los medios comenzaron a usar el término “Nueva normalidad” durante la pandemia).
La Nueva Normalidad en el sentido negativo consiste en mayores desafíos, tormentas más feroces, oscuridad más densa, presiones intensas e incertidumbre. El Señor destacó que ya no vivimos en un “tiempo de paz”, sino que hemos entrado a la nueva normalidad de un “tiempo de guerra”.
Sin embargo, Él también está trayendo una Nueva Normalidad positiva para el pueblo de Dios. Está trayendo restauración y avivamiento a la Iglesia, así que lo “normal” en el Libro de los Hechos será la Nueva Normalidad para nosotros. El terremoto del cambio y el zarandeo serán necesarios para el nacimiento de una Nueva Normalidad en la Iglesia .
De hecho, el Señor está cambiando el entendimiento y la expresión del cristianismo en una generación. Él está introduciendo a su Iglesia a un odre nuevo. Ya no estaremos enfocados en los servicios dominicales, en los programas, o en un edificio, pastor principal, etc, sino que estaremos centrados en Jesús, cimentados en su Palabra y guiados por el Espíritu Santo.
Él nos está llamando a dejar de vivir la vida de manera natural. Él nos llama a salir del institucionalismo de la “Iglesia” para entrar a una Nueva Normalidad, ser el Cuerpo de Cristo, guiados por el Espíritu .
Actualización Divina
Por último, pero no menos importante, el Señor promete traer una actualización divina a su Iglesia para manifestar su poder, autoridad y los frutos del Espíritu. El Covid-19 expuso nuestra falta de perspicacia profética y poder sobrenatural, sin embargo, Dios no nos dejará allí.
Él nos está llevando a otro nivel para manifestar mayores señales, prodigios y obras sobrenaturales, con una mayor autoridad y poder en la casa de oración. Con una mayor comprensión de la realidad espiritual. Nos levantaremos para convertirnos en la Ekklesia (Mateo 16:18) contra la cual las puertas del Hades no prevalecerán.
Vivir en la Nueva Normalidad y tomar esta “actualización Divina” será crucial para avanzar. Ya que muy pronto enfrentaremos situaciones en las que no habrá ninguna solución humana viable.
La única respuesta será escuchar al Señor en oración y trabajar con Él, mientras nos dirige, guía y direcciona. Necesitamos ser sensibles al Espíritu para que podamos escuchar la voz del Abba con total claridad. Necesitamos poseer la autoridad y el poder que nos capacitará para librar la guerra espiritual.
2021 – Abrazar, Participar, Entrar
Con las tres palabras proféticas del 2021, el Señor estaba dirigiendo a su pueblo a abrazar su historia reservada para los últimos tiempos. Despertando nuestros corazones hacia Él para adentrarnos al proceso de preparación y vivir su Nueva Normalidad, cumpliendo las promesas para nuestra generación.
Abrazar
Dios dijo que su pueblo tenía que abrazar de todo corazón su historia y hacerla nuestra. Esto requerirá que rechacemos cualquier otro relato, incluido el que nos intenta inculcar el mundo secular. Debemos “saltar” a su historia y ocuparnos de los asuntos de nuestro Padre.
Esto significa aceptar plenamente las promesas y el destino de Dios para esta generación, sin perseguir nuestros propios sueños o agendas. Si solamente vislumbráramos la realidad de que muchos jóvenes de hoy verán el regreso de Jesús, nuestro enfoque cambiaría totalmente.
Participar
El Señor nos llamó a participar, “ser parte” de su corazón, sobre todo de dos aspectos esenciales. En primer lugar, Él desea que seamos parte activa de su corazón, a través de la intimidad. Él no está buscando jornaleros que sirvan por obligación, sino amigos del Esposo que se preocupan profundamente por Él y sus propósitos.
En segundo lugar, Él nos está llamando a participar de su corazón para prepararnos bien en esta década de preparación para los tiempos. Esto es crucial si queremos fortalecernos y resistir las tormentas que se avecinan, para ser la luz de Adonai que brillará en medio de la oscuridad venidera.
Sin nuestros corazones conectados y participando del corazón de Dios no podremos entrar plenamente en sus promesas.
Entrar
En retrospectiva, la pandemia del Covid-19 y la guerra de Ucrania han sido interrupciones divinas para que Dios dirija al Cuerpo del Mesías a la preparación divina, para que podamos entrar en sus promesas.
Ahora estamos dentro del Tiempo Soberano y Señalado de Dios, veremos el cumplimiento de sus promesas para la generación del Tiempo del Fin. Sería necio por nuestra parte que si estamos en la hora kairos de Dios, nos la perdamos porque no respondimos adecuadamente. A medida que tenemos comunión con el Señor, podemos confiar en que Él nos dará la gracia para entrar y manifestar sus promesas, para recibir la actualización divina e implementarla porque Él lo ha preparado así para nosotros.
Tenga cuidado de cómo responde
El Señor nos reveló que hay cosas que pueden impedirnos entrar en su plenitud: Un corazón insensible o endurecido (Heb. 3:7-8), la incredulidad (Heb. 3:12), la pasividad (Heb. 4:11) y el temor. Necesitamos prestar atención y corregir nuestros corazones con diligencia para que seamos tenidos por dignos de entrar en la plenitud de todo lo que Abba tiene para nosotros. Ciertamente, no queremos ser como la generación de israelitas que no entraron a la tierra prometida por su corazón incrédulo.
De hecho, al mirar hacia atrás y ver las palabras proféticas que el Señor nos ha dado durante estos últimos 13 años, podemos estar verdaderamente agradecidos y asombrados.
¡La precisión de las palabras de Dios y su infalible liderazgo nos dejan sin dudas de que Él está con nosotros!
Él es Aquel que está en el trono y orquesta los eventos, diseña los cambios y las transiciones. Él nos está invitando a ser parte de su mover y nos guía a una temporada de preparación.
Siendo testigos de su liderazgo profético podemos tener una gran confianza en que el Señor continuará guiándonos a través de las próximas desafiantes décadas. Él trabajará profundamente en nuestras vidas y nos transformará para convertirnos en el tipo de personas que llevarán su gloria y su luz. ¡Y esto sucederá cuando nos alineemos con Él y nos encomendemos a su fiel mano de liderazgo!
Si el Señor ha conmovido tu corazón con estas palabras del 2020 y 2021, puedes escuchar la Palabra del Señor para el 2020 y para el 2021.
Preparación para los Tiempos (Introducción) | Entrenamiento en línea Nuevo lanzamiento
A la luz de la palabra de Dios, la década del 2020 es de preparación para los tiempos, hemos preparado un curso de Entrenamiento en línea para aquellos que deseen responder y comenzar su viaje de preparación para la Nueva Era.
Este curso es gratuito y deseamos equipar a tantas personas en el Cuerpo de Cristo como sea posible.
Oramos para que el Espíritu Santo lo dirija, lo guíe y lo fortalezca a medida que usted responda su llamado.
Escribiremos acerca de cómo será la gloria de Dios sobre su pueblo y qué significa prepararse para el Tiempo final en próximos correos electrónicos. Mientras tanto, les animamos a buscar a Abba para recibir revelación y comprensión acerca de la hora que estamos viviendo y pedir sabiduría para saber cómo vivir un tiempo tan crucial como este.